«La Navidad mantera solo traerá más muertes»
El titular de CAME Gerardo Díaz Beltrá se refirió a los videos difundidos en «La Salada» de Buenos Aires.
“Estamos dilapidando el terrible esfuerzo económico y social realizado en la cuarentena”, sostuvo el presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Gerardo Díaz Beltrán, que destacó que el comercio absorbió los costos de protocolos y el sostenimiento de empleados vulnerables que, desde hace 9 meses, no asisten a sus trabajos, “mientras que los gobiernos hacen la vista gorda de los vendedores ilegales y las mafias organizadas”, expresó. “La Navidad mantera sólo traerá más muertes”, agregó.
“La venta informal de este año está rompiendo todos los equilibrios. Invasión de manteros, aglomeración de gente comprando en las veredas, batallas entre comerciantes y manteros, peleas entre compradores, corridas entre manteros, gritos y multitudes de personas ingresando a las saladas y saladitas del país, sin ningún tipo de medida sanitaria en plena pandemia”, detalló.
Por otro lado, destacó que “para sumar desconcierto entre los comercios pymes que invirtieron y esperaban recuperar este fin de año algo de lo perdido con la cuarentena, las autoridades en diferentes ciudades no toman ningún tipo de medidas, escudándose en las “necesidades sociales” y emergencia económica”.
Sin embargo, cada mantero en la calle son empleos formales que se pierden, porque el comercio no cubre sus costos con las ventas.
De acuerdo con el relevamiento realizado por CAME en todo el país, en el 84% de las localidades no se están aplicando controles a la venta informal, o bien son insuficientes. El fenómeno es muy intenso, especialmente en las ciudades más grandes y en aquellas que tienen altos indicadores de pobreza y desempleo.
“El comercio estuvo cerrado muchísimo tiempo, justamente para preservar y contribuir a un estado sanitario que todos queríamos, mientras que la Navidad mantera sólo traerá más muertes”, resaltó Díaz Beltrán.
La indignación del sector es total, y es que, a las pérdidas millonarias por la cuarentena, se sumaron miles de comercios que cerraron definitivamente sus puertas por no poder sostener costos de alquileres, salarios, protocolos, aguinaldos, pagos de servicios, impuestos y contribuciones, ante el impedimento de reducir la nómina de personal, para hacer frente al desplome histórico de las ventas minoristas.
En Chaco, aseguran que se descontroló el comercio informal en vísperas de las fiestas. “Sucede en casi toda la provincia. Lo único que apacigua el impacto, es la reducción del ingreso de mercadería proveniente de Paraguay y Bolivia, por los controles en las rutas que demanda el COVID-19”, mencionaron desde CAME.