La industria del litio se multiplicará por ocho hasta 2027: cuánto puede captar la Argentina
La reconversión de las industrias para que se alimenten con energías limpias se instala en la agenda global cada vez con más fuerza.
Anuncios como los del presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, acerca de que, en 2035, toda la electricidad de Estados Unidos deberá ser producida por fuentes renovables, y que para 2030 la mitad de los vehículos que se vendan serán eléctricos tendrán fuerte impacto en distintas industrias. Una de las más relevantes es la de la producción de litio, ya que esas soluciones limpias para la movilidad y el transporte requieren de un sistema de almacenamiento de energía que demandará el uso de ese mineral, del que la Argentina tiene el 22% del total mundial de las reservas.
Según un informe del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS, por sus siglas en inglés), con sede en Washington, el precio del litio se duplicó entre 2016 y 2018 y se vaticina que la industria se multiplicará por ocho de aquí a 2027.
«La creación de las baterías de iones de litio en 1991 transformó la tecnología eléctrica en virtud de su poder como baterías recargables y livianas que podían almacenar grandes cantidades de energía. Solo en los últimos cinco años, la demanda de baterías de iones de litio se ha disparado, y el precio del litio se duplicó entre 2016 y 2018. Se espera que esta tendencia continúe en el futuro; se espera que la industria del litio crezca casi ocho veces para 2027», señala el informe del think thank.
A su vez, un reporte del Centro de Estudios de la Nueva Economía, de la Universidad de Belgrano, informa que las reservas con que cuenta la Argentina se estiman en 19,3 millones de toneladas, lo cual equivale al 22% del total mundial. En 2020 produjo 6.200 toneladas, ocupando el cuarto lugar en la producción global, detrás de Australia, Chile y China.
«Si bien la Argentina tiene en la actualidad la ventaja de contar con proyectos con elevada concentración de litio, los avances tecnológicos pueden poner en riesgo esta ventaja en el futuro. En las condiciones actuales, se estima que el litio podría llegar a aportar a la Argentina hasta 3.500 millones de dólares anuales en exportaciones», agrega el reporte.
La competencia del país está bastante cerca, ya que América latina es la región del mundo con mayor cantidad de litio. El llamado Triángulo del Litio abarca las fronteras de la Argentina, Bolivia y Chile. «El estratégico mineral se encuentra debajo de los salares existentes en dicha región, que acumulan el 85% de las reservas mundiales de fácil extracción», sostiene la UB.
Aproximadamente el 58 por ciento de los recursos de litio del mundo se encuentran en estos tres países, según el Resumen de productos minerales del USGS (Servicio Geológico de los Estados Unidos) de 2021.
De los 86 millones de toneladas de recursos de litio identificados en el mundo, Bolivia posee 21 millones de toneladas, seguida de Argentina con 19,3 millones de toneladas y Chile con 9,6 millones de toneladas. «Si bien Chile ha transformado con éxito la mayoría de sus recursos disponibles en reservas económicamente viables disponibles para la producción comercial, Argentina y Bolivia hasta ahora no lo han logrado, en gran parte debido a climas de inversión desfavorables y condiciones geográficas más desafiantes», plantea, por su parte, el plantea el CSIS.
El centro con sede en Washington afirma: «A medida que los impactos del cambio climático se propaguen por todo el mundo, la importancia del litio como mineral estratégico aumentará exponencialmente para convertirse en un componente esencial para los sistemas de energía limpia del futuro. Estas tendencias indican que el control de la industria del litio podría generar importantes beneficios en el futuro, lo que probablemente aumentará la disputa geopolítica entre las grandes potencias».