Las pymes bonaerenses dicen que la temporada turística está en «emergencia económica»
La Federación Económica de la Provincia de Buenos Aires (FEBA), a través de su área de Turismo, evalúa los efectos de la pandemia sobre la industria del Turismo desde el 1 de diciembre de 2020 hasta la primera quincena de enero de 2021. Según datos del Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación, unos 6 millones de turistas se movilizaron a distintos puntos del país al comenzar la temporada de verano. Sin embargo, la Federación indica que el sector turístico está preocupado por las nuevas restricciones anunciadas a partir del aumento de contagios registrado en el último mes.
“El sector del turismo se preparó para la temporada de verano luego de un 2020 muy duro, de paralización completa de la actividad a raíz del COVID-19 y las medidas restrictivas aplicadas por las distintas autoridades en todo el país. Todo estaba listo para comenzar una temporada que serviría de recuperación de cara al año que comenzó, pero lo cierto es que los rebrotes complicaron la situación”, explica Daniel Loyola, presidente de Turismo de FEBA. Durante los últimos meses del año, las Cámaras y los Ministerios de Turismo de cada provincia y municipio del país trabajaron para llegar de la mejor forma, cumpliendo con las medidas y protocolos de seguridad sanitaria para que los turistas pudieran disfrutar de su descanso.
“Los prestadores turísticos se endeudaron mucho para sostener los gastos fijos durante nueve meses de parálisis. Y confiaban en una lenta reactivación durante el verano. Muchas empresas y comerciantes tuvieron que sacar préstamos para poder sobrevivir”, señala Loyola. Desde FEBA indicaron que las localidades de la Costa Atlántica y de la provincia de Córdoba representan el 60% del movimiento turístico de lo que va del verano. Le siguen Entre Ríos, Río Negro, Neuquén, Mendoza, Salta, San Luis y Chubut. “En Mar del Plata, de lo que va del mes de enero, la capacidad de ocupación fue solo del 40%. Este número varía un poco según cada zona, pero el promedio es en general bajo”, aseguró Loyola y agregó: “Una tendencia clara de los turistas para este verano fue la elección de departamentos, casas de alquiler por temporada, en lugar de ir a hoteles», dijo y recordó que el motivo es porque entienden que es más seguro en el contexto de pandemia.
«Eso también explica el nivel bajo de consumo en restaurantes, comercios, actividades recreativas, a la crisis económica se le suma el miedo al contagio y la gente elige quedarse en las casas o departamentos que alquilaron”, manifestó. Se estima que, hasta el 30 de diciembre del año pasado, un 15% de la hotelería de todo el país tuvo que cerrar sus puertas; al igual que cerca del 10% de las agencias de viajes», indicó Loyola. Por su parte, el titular del área de Turismo de FEBA recordó la mala situación que vive la industria del turismo de reuniones. Las empresas están organizando todo de manera virtual ante la imposibilidad de realizar convenciones, congresos, ferias, lo cual se suma a las restricciones para viajar de un país a otro. “La situación es de emergencia económica para todos los sectores de la industria de turismo. Hoy nuestra suerte está librada al avance de la vacunación en Argentina y en todo el mundo. Al mismo tiempo, la actividad necesita seguir recibiendo la ayuda del Gobierno a través de los ATP, porque no se puede dejar caer a este sector que nuclea a un millón trescientos mil trabajadores entre directos e indirectos, y es uno de los cuatro pilares de la economía de nuestro país”, concluye el presidente de Turismo de FEBA.