Por: Federación de Entidades Empresarias de Río Negro (FEERN).

La pandemia generada por el COVID-19 desnudó lo peor de cada uno y profundizó la exigencia constante a la que son sometidos los sectores productivos. Quienes sólo sabemos producir, generar empleo, emprender, e innovar, hemos sido sometidos al apetito insaciable del Estado, que no sólo se convirtió en nuestro socio mayoritario -presente sólo en las ganancias-, sino que además en uno desleal por momentos.

A pesar de que creemos ser parte de la sociedad, con los mismos derechos y obligaciones, últimamente se nos demuestra todo lo contrario. Merecido, correcto o no, los trabajadores tanto privados como estatales recibieron aumentos en sus ingresos, también los funcionarios, los planes sociales, los jubilados, …¿y las PyMES? 

Es realmente inentendible el autismo del Estado. Apelamos a la sociedad toda, a entender que éste es el camino equivocado. No podemos darnos el lujo de perder más actividades productivas. Hoy el camino es modernizar al Estado y liberarlo de toda carga improductiva que impide que nuestro país crezca. El país sigue funcionando con la mayoría del plantel estatal en modo avión. Es el momento de hacerlo.

Nos es imposible cumplir con todas las obligaciones que se nos impone desde el Estado. Nos quedan sólo dos caminos: renunciar o migrar a la informalidad, donde por supuesto, con la connivencia de nuestros funcionarios es mucho más simple funcionar, sin tributar nada, sólo dejando algo en la ventanilla correcta.

Es realmente peligroso llegar al modo supervivencia, donde cada uno intentará con los recursos a mano tratar de sobrevivir. Exigimos un gesto, una luz de esperanza para poder seguir funcionando, para entender que les importamos y que comprenden que somos uno de los motores productivos capaz de activar nuestra Economía. Esa, es la única salida.